Amy es la fiel gata de Emilio. Es una ávida exploradora de Hopewell Bay. Durante uno de sus viajes por todo el mundo, Emilio se la encontró en la calle. Aunque tan solo era una cría, era inteligente como ningún otro gato y una cazadora nata. Sin embargo, lo que más impresionó a Emilio es que nada fenomenal. ¡Mientras que él no sabe nadar! Amy también le trae los peces que atrapa, vivitos y coleando. La primera vez que le trajo uno, Emilio se dio cuenta de que había hecho una amiga para toda la vida. Amy, como buena gata que es, tiene una tendencia a explorar y colarse en los sitios más insospechados (y en los que normalmente se supone que no son para gatos). Es posible que un día su curiosidad la lleve a descubrir más de un secreto oculto del que ya nadie se acuerda.