Hank está tan seguro de sí mismo que debería ser ilegal. Se considera un verdadero «artista»: pinta, es modelo, hace diseño de interiores y escribe poesía profunda y reflexiva... O eso es lo que él cree. La verdad es que es sorprendente que sepa cómo subir las escaleras. Aunque parece orgulloso y seguro de sí mismo, es bondadoso y a menudo ofrece gratis sus servicios o da consejos erróneos. Es guapísimo y está cachas. A Deb no se le ha pasado por alto, lo que plantea la siguiente pregunta: ¿es Hank más de lo que parece y esto es solo una burda estratagema para meterse en la familia?